Normalmente con el manga ando algo despistado y siempre con la sensación de estar perdiéndome grandes obras, es frecuente encontrarte en este maravilloso mundo del internete listas de recomendaciones de manga, más o menos en estas listas son fijos el trío Tezuka, Taniguchi y Urosawa y la gente va colando alguna cosa más. De esta manera llegué a conocer Ikkyu, además al ver que se trataban solo de 4 tomos, el coleccionista que llevo dentro me frena a lanzarme a colecciones de cientos de números, me anime a adquirirla.
Para el que no conozca nada se trata de la vida de un monje budista en el siglo XIV, la obra recoge desde su nacimiento hasta su muerte, con un ritmo narrativo continuo ves como evoluciona Ikkyu, y como llega a mostrarse como un monje atípico, que no respeta los sistemas establecidos, bebe shake, va a burdeles, aparentemente blasfema,… como reniega de la iluminación, sin día no hay noche.
Hay una cosa que me ha sorprendido gratamente, y es que Ikkyu como es normal se va creando enemigos a lo largo de su vida y en ningún momento intenta vengarse y darles la lección definitiva, teniendo oportunidades de sobra para ello, esta ausencia de quedar por encima de nadie es su manera de vivir, el no está preocupado por lo que hacen los demás.
Otro tema que se ve de manera detallada es la historia del Japón de la época, aquí aunque se refleja perfectamente el ambiente y como vivía la población, hay momentos en que la ignorancia del tema hace que te pierdas un poco, a pesar de la excelente edición de Glenat y la multitud de anotaciones que incluyen. Eso si la esencia de las guerras, epidemias, conspiraciones, traiciones y demás las tiene todas, incluso en algún momento parece exagerado, no puede un simple campesino tener un par de años de tranquilidad y buena cosecha.
Finalizando otra maravilla del manga que me alegro de no haberme perdido, y si hay más cosas así por favor avísenme.
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