Qué bien sienta sorprenderse cuando lees algo, al leerme los dos números de Pedro el Coatí, creía que me iba encontrar una temática infantil (sin que esto sea malo) pero me he encontrado unos animales viviendo en un zoo que fuman, beben, cocinan y juegan al tute.
A pesar de mis últimas visitas al zoo (nene´s rules) no tenía ni idea de lo que era un coatí, que es un oso con cara de vacilón que vive en la zona central de Ámerica y es el personaje principal de una sarta de animales a cada cual mas vacilón.
Tenemos un erizo que se compra un Mac y es un hacha al Virtual Fighter, unos cocodrilos de paladar exquisito, unos buitres puñeteros, unos chacales un tanto cutres, unos elefantes drogodependientes, … y un sinfín de animales a cada cual más pintoresco.
Se trata de historias cortas montadas sobre un gag pero que tienen más de una lectura o que esconde una ironía. Se trata la muerte, la ecología, las drogas, todo con una sonrisa y con un dibujo que encaja perfectamente (no conocía a Gaudelette hasta ahora). Hay historias geniales: la orca asesina, el beisbol, los koalas, el safari violento, ...
Vamos que es INNOBLE no leer este tebeo.
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