Todo el mundo quiere hacer negocio de tu nostalgia infantil, desde un coleccionable de Mazinger Z a un plan de pensiones por la abeja Maya.
Yo a la nostalgia no me atrevo a tocarla, estoy seguro que cualquier acercamiento empeoraran mis mitificados recuerdos.
Esta reflexión va ligada a los impactos que recibe un niño ahora, que no tienen comparación, antes ver dibujos animados era un acontecimiento ahora es algo accesible a todas horas, piensen en juegos, parques temáticos, películas,juguetes .... la diferencia es abismal, no quiero entrar en valoraciones absurdas, al final cada uno somos víctimas de nuestra época.
Una cosa seguro antes y ahora: Mataría por una de las camisetas que lleva el personaje !!!!!!!
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